Los hechos ocurrieron a principio de julio, cuando una niña de corta edad y vecina de la localidad sufrió un corte en el pie que le levantó una cantidad considerable de piel. El accidente se produjo mientras la niña disfrutaba del inicio de la Escuela de Verano de la localidad y la herida le provocó no poder realizar actividades aquáticas durante quince días.
En el momento del suceso se precintó el tobogán, situado en la piscina infantil, y al poco tiempo volvió a estar en funcionamiento. La familia de la menor, que no ha querido reclamar por los daños, pero que sí ha registrado un escrito para pedir una explicación oficial, ha lamentado que después de todo un año la piscina cerrada “no se revisen a fondo las instalaciones de los más pequeños para evitar estos accidentes”.
El asunto, que llegó al Pleno del Ayuntamiento tras una pregunta de la oposición socialista, -y en la que por su parte se insistió nuevamente disponer de un contrato con una empresa de mantenimiento y revisión de parques-, fue respondida por el alcalde Comes (PP) asegurando que se había informado sobre el estado del columpio y afirmó que ya estaba en buenas condiciones.
Al respecto de la Escuela de Verano, desde el Ayuntamiento se emitió una nota de prensa destacando el ‘éxito’ que había supuesto que alrededor de 250 niños y niñas hayan participado en la Escuela veraniega de este año y con el objetivo de ayudar a compaginar las obligaciones laborales y familiares.
